---Para con la queja quejoso!

Me he quejado tanto que me he vuelto una experta! como dijo mi querida Indira...
Pero si tengo todo para ser feliz! una familia aquí y hasta una extensión de ella en una llamada y muchos abrazos a un avión de distancia… salud, educación, agua corriente… baño, zapatos, cuadernos, transporte, huevos… un país allá y un país aquí… libertad y opciones… y un cielo con un sol amarillo pollito que dibuja trazos plateados en el lago que está cerca de casa.
Y de pronto la realidad me golpea. Con toda su sabiduría, su grandeza, su sencillez: ¿cómo es posible que me queje? ¿cómo es posible que llore?
Sedrick Tshiambine es un joven que salio en una foto de la revista Liahona. Este muchacho africano desea servir una misión religiosa por dos anios, por sus escasos medios no le quedo de otra que salir a vender bananas en su bicicleta. Parecería algo de lo que no podemos sorprendernos, es normal saber que cada ser humano debe ganarse el pan de cada día, sin embargo a mi me llego profundamente la admiración por su esfuerzo, su valor, y su fe.
Vive en África, recorre alrededor de 15 a 30 kilómetros por día para ganar el valor de un dollar con veinticinco centavos a la semana....siiii! leíste bien! $1,25 o $65,00 al anio!

Inmediatamente me fui a aquella República Democrática de Congo para ponerme en sus zapatos desde esta ciudad tan lejana, e ignorante de travesías semejantes por aquellos rumbos. Quería abrazar a Sedrick y darle de regalo esos $250 dollares que necesita solo para el pasaporte, para salir a su predica cristiana.
Algo me apretó el estomago. Se me subió un calor a los pómulos quizá de la pena de saber que...su semana de trabajo para mi es nada mas ni nada menos que....el valor de una hamburguesa del Wendys, de un yoyo del negocio de juguetes que vende todo por 0,99 centavos....el valor de dos donuts, de un tercio de paquete de cigarros, de dos libras de bananas en Texas,.....cuantas serán las que vende por allá por Luputa para ganar esas cinco monedas de aquí de USA?
Como sera su cara de felicidad cuando recibe el pago de su salario?
$1,25 = a 25 centavos diarios si le doy dos días libres de tanta bicicleteada.
$1,25 = o mejor dicho desigual a diez centavos por kilómetro, ya que el pobre semanalmente recorre 180 kilómetros!!!!!! veo que estoy mejor con cálculos....y supongo este chico es un experto en la materia, racionar sus alimentos con aquel lamentable presupuesto es imposible.
Dejame recordar aquella dieta magnifica que seguí por unos días donde en base a Hoddia p57 baje demasiadas libras. Las píldoras naturales importadas desde África, que extrajeron de unos cactus, son tomadas allá para aguantar su hambre, y aquí las tomamos para restar el nuestro.
Entonces cierro los ojos y le doy gracias a Papá Dios. Y a Sedrick. Y a la vida, y al universo, y a los ángeles y a todo lo bonito, lo vivo, lo perenne.

Que se puede hacer?, no cruzar los brazos!
Pobreza mundial, la resigna el pueblo,
mientras tantos otros como allá, aquellos,
viviendo limosnas en un mundo ajeno.
Yo en un condominio, vos allá en tu choza.
yo en sabanas limpias, vos ni con baldosas,
contando tus días, pensando en tu meta,
yo sintiendo pena por tu bicicleta.
Si tuviera un poco mas de lo que tengo,
te traería aquí, yo te adoptaría,
como a un hijo mio yo te ayudaría,
tendrías tu casa, tu cama, tu espacio,
un plato caliente, un abrazo tibio,
un recreo grande de piernas cansadas...
Ay negrito bueno! se dará algún día?
en auroras futuras los pueblos vecinos
te den una mano, te ofrezcan abrigo?
sandalias de goma de auto improvisadas,
se transformen por magia en reales calzados...
que la gente vea, tu necesidad extrema
del amor de hermanos y comprensión fraterna,
Mis ojos se inundan por gran impotencia
de saber que existes, que no sos un cuento,
que manana temprano saldrás como siempre,
a vender bananas por fe en tu cimiente...